Estimados amigos, cuando los 12 espías que habían vagado por la Tierra Prometida regresan a Moisés y le informan, 10 de ellos están decididos a regresar con el pueblo a Egipto y sólo Caleb y Josué tienen una visión diferente, a pesar de que todos observaron lo mismo. Ellos ven más (Números 14). Hay personas que se guían por el miedo del momento y otras que tienen una visión más amplia.

¡Cuánta diferencia hay entre confianza y miedo usando el ejemplo del Hospital Shell! Este mes se cumplen 11 años de experiencia con un Dios fiel. En estos últimos 6 meses hemos experimentado lo que puede lograr una buena gestión y agradecemos un buen ambiente de trabajo. La época del conflicto interno es cosa del pasado. Un equipo directivo se reúne y decide en conjunto. 

La oración ha vuelto a pasar a un primer plano. No son sólo las reuniones de oración de los miércoles las que cuentan con mayor asistencia. También son frecuentes los discursos espirituales de los empleados en la sala de espera. Este es un gran progreso.

Un ejemplo de cómo se integra el equipo son nuestros alumnos en su año de internado que vienen desde Quito. Ellos permanecen en Shell por unas 5 a 6 semanas. El hospital paga su alojamiento y comida. Muchos de ellos donan el dinero para alimentos a nuestro fondo social para pacientes necesitados, lo que significa mucho más que la cantidad monetaria. Trabajar en el hospital se convierte en parte de su vida. 

Hace dos meses informamos sobre la niña con leucemia que recibió ayuda con el tratamiento en un hospital infantil de Quito. La niña vino a nosotros ahora después de completar la quimioterapia. La niña necesita ahora más controles a corto plazo, pero parece haber superado el tumor. Las “Damas Alemanas” de Quito ayudaron – muchas gracias!!

Hace casi un año, la Dra. Bezemer inició un experimento: una farmacia en una remota aldea indígena. Las distancias allí son grandes y los medicamentos básicos no están disponibles. Se ha capacitado a trabajadores sanitarios de las aldeas para que puedan manejar una farmacia básica que Shell renueva según sea necesario. Ganan algo por su trabajo y son supervisados constantemente. Sólo podrán seguir vendiendo medicamentos si la contabilidad es correcta. De esta manera, los lugareños crecen en responsabilidad por el bienestar no sólo de su pueblo, sino de toda la zona y son responsables de la seguridad de la farmacia. 

También aprendemos de nuestros errores. Hace años se extendió invitaciones a líderes indígenas y firmamos contratos de tratamiento médico con sus organizaciones. Tratamos a los pacientes pero el pago nunca llegó. Mientras tanto, el liderazgo de la organización indígena cambió y nadie se responsabiliza por los contratos. Ahora hemos perdonado oficialmente sus deudas en una reunión con los nuevos jefes, pero también hemos demostrado que las cosas ya no pueden seguir así. Si quieren beneficios, tienen que actuar primero. Sólo una situación en la que ambas partes ganen tiene futuro. Este proceso de aprendizaje también fue difícil para nosotros. También necesitamos donaciones para esto. 

La directiva en mayo 2023 realizó muchos buenos procesos administrativos. Pero algunas cosas están resultando ahora demasiado complicadas. Nuestra administración debe volverse más ágil. La contabilidad en particular está en proceso de darnos cifras para mejorar en estos días. Estamos en el proceso de hacer que el hospital sea más eficaz y de tratar a los pobres sin depender constantemente de donaciones. Siempre necesitaremos ayuda externa, pero más específica, no sólo general. Queremos ser mejores administradores. 

Esto también requiere un proceso de aprendizaje interno. La casa de huéspedes internacional no está terminada todavía. Amigos de USA nos visitaron estos días. En el futuro también quieren venir con grupos de         estudiantes      de        medicina             de        las respectivas universidades. ¡¡¡Todavía necesitamos ayuda para esto!!! 

El Hospital Shell tiene futuro y tenemos la visión de tomar posesión de la “nueva tierra”, aunque al principio y en el medio siempre hubo voces para rendirse y “regresar a Egipto”, como entonces con Caleb y Joshua en toda negación. En aquel tiempo, Dios personalmente se mostró a todo el pueblo con su presencia y anunció otros 38 años de peregrinación por el desierto. Ya estamos en camino y esperamos poder acortar este desvío. Nuestro equipo no va a “morir” en el camino. Podemos aprender de estas experiencias de la historia bíblica y tomar posesión de la tierra que él ha extendido ante nosotros. Gracias a todos por todo vuestro apoyo.

El equipo del Hospital Shell

Eckehart y Klaudia Wolff

Donaciones a:   

Fundación Misión Cristiana de Salud

Shell, Pastaza

Banco Internacional

CC 653572  BINTECEQ          

RUC 1691716704001

(fotos: Dr. Jacobo Bezemer, Ing. Jenny Tapia)