Estimados amigos, la Pascua ha terminado, pero en el hospital se celebra la Pascua en el sentido judío. Para hacer esto, se debe limpiar la casa y desechar la levadura vieja. Es el nuevo comienzo en la casa y en la propia vida. No es coincidencia que la resurrección corriera paralela a este tiempo. La vida judía y cristiana forman una unidad. Antes de Semana Santa, Dra. Amparo Torres asumió la dirección del hospital. Como novata, le tomó un tiempo conocer cada área antes de hacer cualquier cambio.
Durante este tiempo, obtuvimos el permiso previo de funcionamiento por parte del cuerpo de bomberos. Además, el Ministerio de Salud (ACESS), realizó también su inspección anual al hospital. Gracias a Dios tenemos permiso para funcionar otro año más, pero con varias observaciones. Nos duele que nuestra ecografista ya no pueda trabajar allí porque no tiene el título oficialmente exigido de especialista en rayos X. Hemos podido realizar estas pruebas durante años, pero ahora ya no es posible. Y, una vez que el Ministerio anuncia oficialmente una prohibición, debemos cumplir con esa disposición. Otra de las observaciones fue la fachada exterior del hospital. Queríamos posponer su arreglo porque otras cosas son más importantes, sin embargo ahora, nuestro equipo de mantenimiento está ocupado mejorando la fachada y esperando a que no llueva para pintarla nuevamente.
El Ministerio de Medio Ambiente requiere que hagamos otras mejoras: la modernización de nuestros equipos. Se realizó la “limpieza” de muchas habitaciones con equipos antiguos y “basura valiosa”. A lo largo de los años se han acumulado dispositivos y “regalos” que podrían haber sido útiles, pero lamentablemente éstos han caducado. La nueva administración se ha “desprendido” de todo para evitar que se genere cualquier tipo de problema. Duele un poco, pero es más seguro. Entonces, la casa está “limpia de la vieja levadura” por dentro y por fuera. El equipo de renovación no alcanzó a finalizar la reconstrucción de la casa de huéspedes para extranjeros. Pero queda la visión de un intercambio internacional en el Hospital Shell. El último equipo de Alemania que estuvo en marzo dejó su huella. Uno de los participantes ahora quiere estudiar medicina para luego trabajar en el Hospital Shell. Una vocación de futuro. En cuanto la casa esté terminada buscaremos estudiantes, grupos que quieran ayudar de manera práctica y en el sector salud. Como ya se informó varias veces, Shell se convertirá en un lugar de encuentro internacional. No estamos buscando turismo, pero tales experiencias muestran que muchos jóvenes viajan después del colegio y durante su formación universitaria y varias veces reciben en este tiempo la vocación de su vida. Después de la casa de huéspedes internacional, para la que aún faltan algunos fondos, ahora está pendiente el alcantarillado. Es difícil pedir oración y donaciones. Cuando se piensa en un hospital misionero, ¿quién piensa primero en las aguas residuales? Pero esto es necesario. Primero, las aguas residuales de los edificios residenciales detrás del hospital deben separarse y alimentar al sistema público. Esta separación tiene un costo aproximado de USD 10.000,00. El hospital necesita su propia planta de tratamiento de aguas residuales, la cual tiene que ser monitoreada y mantenida; costos: alrededor de USD 40,000.00. El futuro del hospital depende de ello. Los fondos normales del hospital no cubren estos montos. Con la nueva dirección hubo cambios del personal también y ahora se trata de integrar a nuevas personas en el equipo. Es un tema importante que no queda relegado al lado espiritual de un hospital misionero. Hoy tuvimos una reunión de directorio de tres horas y media. Las finanzas necesitan mejorar. Estamos buscando más médicos y hay esperanza de que haya otro Médico Familiar en el equipo. Oren por más incentivo espiritual para los pacientes, las familias y el personal. Estamos emocionados de ver cómo va el reinicio. La esperanza ha crecido. La nueva masa madre ahora puede volver a crecer después de Pascua. Esto también se muestra en la fiesta de la Pascua judía. Y entonces vemos la resurrección en el horizonte. Jesús es Señor también en Shell. Gracias por todas las oraciones y regalos. El Hospital Shell todavía necesita tu ayuda. Saludos
EL EQUIPO HOSPITAL SHELL
(revisión del castellano: Samuel Rivera) (Eckehart y Klaudia Wolff) Donaciones a: